sábado, 29 de octubre de 2011

Guns and roses 2

La vida en Gun's avanza viento en popa a toda vela. Pensamos que si nuestra casa tenía ya un nombre propio que usamos sin parar, se merecía un cumpleaños o como mínimo una inauguración en condiciones (rompiendo una botella de champán en algún lugar del gotelé o algo por el estilo). Como nos pilló en plenos pilares, festividad que se ha comido todo nuestro presupuesto y nos ha dejado en números rojazos, decidimos pasar del champán y meter en casa a mucha más gente de la que cabía. La regla fue la siguiente:

"que tenemos cuatro sillas? pues que vengan 25."
Y así fue.

Durante la aglomeración-cena, a la que llamaremos "bodorrio" hubo globos, guirnaldas, manteles de papel que en otra vida fueron murales, vasos con nombre y apellidos, gente muy guapa, sangría "el casón histórico" asesinatos premeditados, apagones con cumpleaños feliz incluido, y muchas más cosas que jamás recordaremos. Aquí tenéis una prueba del delito:


Una de las razones por las que decidimos montar el bodorrio inaugural fue que nuestra casa, especialmente nuestro salón, ya había adquirido un carácter lo suficientemente pop. Y diréis: ¿cómo es una casa pop?

1. Nuestra mascota es un brócoli. Broc es muy verde y por el momento es nuestro cojín más cómodo.

2. Tenemos una flor de peluche en el baño que canta en un idioma desconocido. Hemos transcrito algo así como "Traurig pesebre chumina for mi, long long ago, long long ago". Es muy bailonga.

Del resto de poperismos, ya hablamos otro día.

Sin duda pronto habrá un nuevo capítulo en la historia de gun's, porque el pro llamó hace poco avisando de que ya tenía en su poder el tendedero que nos prometió. Ahora bien, si algo sabemos en esta casa es que este hombre siempre viene con una sorpresa debajo del brazo.

sábado, 22 de octubre de 2011

What's on a Mrr's mind

Me río porque una noche cualquiera sólo nos faltó conocer a Maikel y a Perri, los últimos dos resquicios del país de los desconocidos (que nos depara muchas sorpresas en el futuro).
Me río porque otra noche cualquiera empezó en un gran bodorrio en el que todo el mundo acabó muerto o teniendo que matarse a sí mismo.
Me río mucho porque me he enterado de que encantadora puede ser un bar, y no sólo una chica, y que si vuelves al día siguiente está en un universo paralelo.
Me sigo riendo porque descubrimos que el rimmel puede ser lo más delatador del mundo, y que los huevos fritos sientan bien a TODAS horas.
Me río río río porque un colchón hinchable puso a prueba nuestra capacidad pulmonar a horas intempestivas y no nos ganó.
Me río otra vez porque una noche cambia mucho si te tomas una pizza congelada, una con la base congelada o una Ristorante.
Me sigo riendo porque es de valientes irse de una cola después de haber esperado una hora, y porque los bocadillos de ensalada césar (los porsiacasos), saben bien.
Me río con los calendarios de bomberos (calentarios) y con los futbolistas de día/camareros de noche.
Y con las performance conceptuales y las casas que hacen chaflán, también.

Esta foto cuenta una historia, y yo no sé cuál es.